- Daño solar: La exposición prolongada al sol puede dañar la estructura del cabello, debilitando su protección natural y causando decoloración, pérdida de brillo y sequedad.
- Desgaste debido al agua salada: Nadar en el mar o pasar tiempo en la playa puede llevar a la acumulación de sal en el cabello, lo que puede deshidratarlo y dejarlo áspero y sin brillo.
- Daño causado por el cloro: El agua de la piscina suele contener cloro, que puede tener efectos negativos en el cabello, como sequedad y decoloración, especialmente en cabellos teñidos.
- Sequedad y frizz: Las altas temperaturas y la humedad pueden llevar a la sequedad del cabello, provocando encrespamiento y dificultando su manejo.
- Daño por el uso excesivo de herramientas térmicas: Durante el verano, algunas personas tienden a usar más secadores, planchas y rizadores para peinarse, lo que puede causar daño adicional debido al calor.
- Sudor y acumulación de productos: La actividad al aire libre y el calor pueden causar sudoración excesiva en el cuero cabelludo, lo que puede llevar a la acumulación de productos capilares y suciedad.
- Problemas del cuero cabelludo: La exposición al sol y el calor pueden irritar el cuero cabelludo, provocando picazón, sequedad o incluso quemaduras solares en casos graves.
Pero, entonces…
¿Cómo protejo mi cabello del sol y el mar este verano?
Proteger tu cabello del sol y el mar es esencial para mantenerlo sano y evitar daños causados por la exposición a los rayos ultravioleta, el agua salada y otros elementos. Aquí hay algunas sugerencias para proteger tu cabello durante el verano o en ambientes donde haya sol y mar:
- Protector solar para el cabello: Al igual que proteges tu piel con protector solar, puedes usar productos específicos para el cabello que contengan filtros UV para protegerlo de los daños del sol. Un ejemplo es el protector solar Sun Care Spray recomendado para cualquier tipo de cabello expuesto al sol.
- Enjuague con agua dulce: Después de salir del mar, enjuaga tu cabello con agua dulce para eliminar la sal. Si estás en la playa y no hay duchas disponibles, lleva una botella de agua para enjuagar tu cabello.
- Evita peinarte en la playa: La arena y la sal pueden dañar el cabello y causar enredos. Trata de evitar peinarte en la playa y, en su lugar, hazlo después de un buen enjuague con agua dulce.
- Utiliza productos hidratantes y reparadores: Usa productos para el cuidado del cabello que estén diseñados para rehidratar y reparar los daños causados por el sol y la sal. Te recomendamos usar el Sun Care Shampoo para limpiar y reparar el daño del cabello.
- Utiliza protectores térmicos: desde Organethic Pure Care os recomendamos el protector térmico Speed Up que contiene extracto de altea y hamamelis.
- Peinados protectores: Considera usar peinados protectores como trenzas o moños para evitar que tu cabello se enrede con el viento o el agua salada.
- Acondicionador después del baño: Después de entrar al mar, aplica el acondicionador Sun Care Conditioner en tu cabello. Esto permite reparar y regenerar el cabello tras la exposición solar.
- Recortar las puntas dañadas: Si notas que tu cabello ha sufrido daños durante las vacaciones, es aconsejable acudir a tu salón de peluquería Organethic de confianza para recortar las puntas dañadas para mantenerlo saludable.
Siguiendo estos consejos, podrás disfrutar del sol y el mar sin preocuparte tanto por los daños a tu cabello. Recuerda que la prevención es clave para mantenerlo precioso y saludable a lo largo del tiempo. ¡Comienza a probar los productos Organethic Pure Care!
